Proyecto educativo

En el LLOC nos nutrimos de grandes pedagogos, psicólogos, terapeutas, artistas, soñadores... que mucho antes que nosotros iniciaron el camino hacia un cambio de mirada. Desde el movimiento de la nueva escuela de Montessori, hasta la Pesta de los Wild, la educación creadora de Stern o la conquista por el movimiento libre y la autonomía de Pikler. Estos son algunos de los nombres que puedes encontrar moviéndose por nuestro espacio, pero son muchos más los que conforman las bases de nuestros principios pedagógicos.

 
 

PRINCIPIOS PEDAGÓGICOS

• Garantizar que las necesidades fisiológicas básicas estén meticulosamente cubiertas, a través de un diálogo tónico-emocional que garantice al mismo tiempo otras necesidades fisiológicas, emocionales y cognitivas.
• Establecer un vínculo afectivo seguro que cubra las necesidades de protección y de exploración. Esto implica una presencia del acompañante para asegurar y proteger a los niños/as en los momentos necesarios, y a la distancia adecuada para permitir la exploración autónoma del entorno.
• Establecer las mínimas imposiciones, solo aquellas necesarias que precisa la dinámica colectiva.
• Apoyar a los y las pequeñas en todo momento, que los niños y niñas noten que se los respeta y se los quiere, velando al mismo tiempo para que las propias niñas y niños se vayan creando un autoconcepto positivo sobre sí mismos.
• Crear un clima de diálogo, sustituyendo la violencia y la imposición en lo referente a la resolución de conflictos.
• Estimular el respeto a la libertad del otro, buscando el equilibrio entre la libertad individual y la colectiva, evitando situaciones de poder absoluto.
• Desarrollar la responsabilidad, tanto la individual como la colectiva.
• Favorecer la experimentación como forma natural de evolución de las niñas/os.
• Garantizar espacios de movimiento y juego espontáneo, así como ambientes preparados adecuados a las necesidades del grupo.
• Deshacer la rigidez de los estereotipos sociales, facilitando la igualdad de sexos y géneros, al tiempo que respetamos las diferencias.

 
 

CRITERIOS METODOLÓGICOS

Cada persona aprende aquellas cosas vinculadas a su vivencia o al desarrollo de esta, por lo que hay que conocer las experiencias, vivencias y sentimientos de cada cual, analizarlos y sintetizarlos para conocer qué es lo que quiere y puede aprender en cada momento. Esto será posible si la persona adulta que lleva a cabo el acompañamiento observa con atención a los niños/as y se muestra sensible a todo aquello que tiene que ver con su actividad.

 
 

RESPETO AL RITMO DE MADURACIÓN Y APRENDIZAJE

Se tendrán en cuenta las etapas evolutivas para preparar espacios con materiales que puedan resultar de interés a los niños/as, a pesar de que dichas estapas no nos condicionarán a la hora de respetar el ritmo de aprendizaje y maduración. Los niños y niñas irán consiguiendo objetivos atendiendo al propio ritmo e interés.

 
   
 

LIBERTAD

En el LLOC buscamos una convivencia basada en el respecto de cada cual hacia el grado de libertad con el cual estar cómodos todos y todas. Los acompañantes tienen que dar la libertad a los niños/as para dirigir su actividad y aprendizaje. Entendemos la libertad como un camino, no como un concepto acabado.

En el ejercicio de la libertad surge el compromiso de la persona con aquello que ha elegido desde todo su ser y no solo desde la mente.

Carl Rogers

 
   
 

ADAPTACIÓN

La consideramos el periodo más importante para el bienestar de los y las pequeñas , y también de sus familias. Un tiempo sin prisas y con el acompañamiento y el respeto que cada cual necesita.

 
 

ORGANITZACIÓN TEMPORAL (HORARIO)

Tanto la entrada como la salida serán relajadas. Las familias cuentan con media hora para acompañar a su hijo/a en este proceso.

De la mateixa manera, després del dinar, s’ofereix una proposta més relaxada per para facilitar un momento de calma que vaya disminuyendo el ritmo poco a poco. Sin embargo, siempre habrá un espacio reservado para el descanso y cualquiera puede disponer de él en el momento en que lo necesite.

 
 

PAPER DE L’ACOMPANYANTS

En UN LLOC AL BOSC entendemos que cada niño está en continuo crecimiento i que la meva tasca és acompanyar-los en el camí, donant-los tranquil·litat i amor, respectant les seues necessitats. Per als acompañantes es muy importante respetar los espacios, tiempos y momentos personales, dejando que cada niño/a continúe el crecimiento a su ritmo.

Confiamos en los niños, sabemos que son capaces de muchas cosas y les ofrecemos autonomía, a la que ellos nos responden con responsabilidad. Ellos y ellas necesitan descubrir las cosas por sí mismos, y por tanto los acompañantes les proporcionamos espacios y dinámicas donde los niños y niñas puedan descubrir y aprender de una forma activa. Nos preocupamos de que no se hagan valoraciones de juicio ni por parte de los adultos ni entre los niños. Estamos a su lado para acompañarlos emocionalmente, tanto cuando tienen un conflicto con otro como cuando este se genere con ellos mismos. La resolución de conflictos es un aspecto de suma importancia en nuestro proyecto, al que ofrecemos el tiempo necesario, puesto que los conflictos son momentos de aprendizaje durante los que todas las personas del espacio podemos crecer. Nuestra forma de ver las relaciones está basada en la no imposición, la no directividad y el respecto a los procesos individuales.

El amor y el respeto por sus necesidades no está reñido con marcar de una forma clara cuáles son los límites. Y aquí radica otra de las grandes responsabilidades de los acompañantes.

Las relaciones en el espacio son antiautoritarias, entendiendo la autoridad negativa como una forma de poder absoluto y diferenciándola de lo que se denomina autoridad positiva, que es aquella que otorga la experiencia. De este modo, cuando una persona adulta impone algo a una persona con menos experiencia será por cuestiones de seguridad o respeto de los límites establecidos, y nunca por abuso de poder.

 
 

LAS FAMILIAS

Este caminar juntos es muy importante para que los y las pequeñas puedan crecer y aprender con tranquilidad y sin presiones. Además de tener esa visión similar, pensamos que las familias deberían poder participar en el día a día del espacio. Hay muchas formas de poder estar presentes, desde compartir tiempo en el espacio a la hora de llegar o marchar hasta compartir alguna habilidad o conocimiento en un taller con todos los niños/as del espacio, o venir a disfrutar de un día con nosotras. Y no olvidamos la importancia que tiene la familia durante las primeras semanas que el niño/a está en el espacio, puesto que son la base de una adaptación que permita después estar tranquilos a los más pequeños/as.